lunes, 12 de septiembre de 2011

Lujuria.

"Lujuria. La mesa de los pecados"
El Bosco.


No puede haber pecado en esta entrega,
en este deshilarse impidiendo la nada,
en este acto de fe.
Que a nadie se le ocurra venirnos con un cuento
lleno de represión y negaciones.
Quien no percibe la generosidad
de mi piel y tus manos
no debe hablar.

(Amalia Bautista)

1 comentario:

Miguel Cobo dijo...

La lujuria es un lujo al alcance de todos. Solo a mentes retorcidas y enfermas se les ocurriría condenar la democratización del placer. Y lo peor es que los más lujuriosos (en el sentido más pecaminoso que ellos le atribuyen)han sido siempre los guardianes de la castidad. ¡Miserables eunucos mentales!