miércoles, 29 de junio de 2011

Balance.


 




Medio vacía o medio llena está
mi vida a estas alturas.
Voy bebiendo lentamente mi copa.
Voy viviendo como voy escribiendo.
Más allá late el papel en blanco.
 Más acá crece el recuerdo como hierba.
 Enciendo otro cigarro que se quema
y prendo otra cerilla que se apagará. 
 Medio vacía o medio llena
 está mi vida a estas alturas.
Trastabilla mi mano tras el humo: voy fumando
mis días lentamente.

 Alumbrará un instante mi rostro la cerilla
que lentamente el viento irá apagando.


( José Fdez. de la Sota )

miércoles, 22 de junio de 2011

Fumando.



"Me pasó como con tanta gente,
se me cayó la ceniza del cigarro,
apresurada la cogí con estos dedos
para que no quemase el tapete,
y nada cogí
-algo frío y grisáceo que ni quemaba ni era-,
me pasó como con tanta gente."

Gloria Fuertes

domingo, 12 de junio de 2011

Mujer con 8 velos y un porqué...




Y velo el sueño de mis hijas...
Y velo el sueño de mi sueño...
Y velo el dolor que me acompaña  ...
Y velo la soledad que ya me aburre...
Y velo la respuesta de mi oráculo...
Y velo la verdad de mi mentira...
Y velo mi deseo postergado...
Y velo el tiempo en que no vivo...
Pero velo la vida de los míos.

(mjm)

miércoles, 8 de junio de 2011

Cardinales: Entrada nº 67




67 Versos en recuerdo de Dadá
  
El uno se arrodilla dulcemente
el dos tiene las trenzas de papel,
el tres llena de plata los triángulos,
el cuatro no solloza,
el cinco no devora el Firmamento,
el seis no dice nada a las serpientes,
el siete se recoge en las miradas,
el ocho tiene casas y ciudades,
el nueve canta a veces con voz triste,
el diez abre sus ojos en el mar,
el once sabe música,
el doce alienta lámparas,
el trece vive sólo en los desvanes,
el catorce suplica,
el quince llama y grita,
el dieciséis escucha,
el diecisiete busca,
el dieciocho quema,
el diecinueve sube,
el veinte vuela ardiendo por el aire,
el veintiuno cae,
el veintidós espera,
el veintitrés adora los vestidos,
el veinticuatro sabe matemáticas,
el veinticinco magia,
el veintiséis amor,
el veintisiete guerra,
el veintiocho estrellas,
el veintinueve luna,
el treinta tiene garras de cerezo,
el treinta y uno flota,
el treinta y dos destruye los anillos,
el treinta y tres anula los espacios,
el treinta y cuatro ruge,
el treinta y cinco vive lejos,
el treinta y seis conoce la amargura,
el treinta y siete fulge,
el treinta y ocho baja,
el treinta y nueve quiebra torres,
el cuarenta se expresa,
pero el cuarenta y uno tiene páginas,
donde el cuarenta y dos halla su espejo,
donde el cuarenta y tres se desmenuza,
en el cuarenta y cuatro anidan tigres,
en el cuarenta y cinco monumentos,
en el cuarenta y seis hay una espiga,
en el cuarenta y siete distracciones,
detrás vienen cuarenta y ocho pensamientos,
cuarenta y nueve signos,
cincuenta cruces,
cincuenta y una lágrimas,
cincuenta y dos mujeres,
cincuenta y tres desiertos,
cincuenta y cuatro pianos,
para cincuenta y cinco partituras,
para cincuenta y seis sonidos,
cincuenta y siete soles,
cincuenta y ocho perlas,
cincuenta y nueve bocas,
sesenta muertes,
sesenta y una llagas,
sesenta y dos pirámides,
sesenta y tres adioses,
sesenta y cuatro diccionarios,
sesenta y cinco sentimientos,
sesenta y seis recuerdos,
sesenta y siete flores.


(Eduardo Cirlot)

 

sábado, 4 de junio de 2011

Ordinales mandamientos.





La primera vez....
La segunda oportunidad...
El tercer hombre...
La cuarta pared...
El quinto elemento...
La sexta mirada...
El séptimo cielo...
El octavo pasajero...
El noveno mandamiento...
El décimo de la suerte...

(mjm)